JUAN PINILLA Y RASHA EN LA INAUGURACIÓN DEL FESTIVAL CINES DEL SUR



FUENTE: DIARIO IDEAL


«Amo el sur», iba diciendo mientras bajaba la calle Real de la Alhambra, mirando a un lado y a otro y deleitándose con lo que veía. «Me gusta el sur», repetía a quien se le acercaba para saludarlo. Precisamente haciendo gala del talante hospitalario de la gente del sur, Omar Sharif aceptó fotografiarse con quien se lo pidió. Elegante, simpático y siempre seductor a sus 77 años. «Prefiero hacerme fotos con mujeres», bromeó. Aun así, también se le acercaron hombres. La Alhambra era ayer un ajetreo de bodas. Pero más de una invitada prefirió quedarse sin coger el ramo por ir a saludarlo y hacerse una foto con él, antes de que a Omar lo engullera el photocall, que además fue un photocall de lujo, en plena fachada del Carlos V. Sin duda, el photocall más bello y con más historia de todos los festivales de cine del mundo. Ojalá esta iniciativa granadina continúe por siempre y siga trayendo a Granada, año tras año, a estrellas del sur como Omar Sharif. Y creando este ambiente tan singular, a medio camino entre oriente y occidente, con el que nos sentimos tan identificados y que toca de verdad nuestra alma. Para quienes se estaban mentalizando en hablarle en inglés fue una grata sorpresa encontrarse con su perfecto español. «Un español que dejé de hablar cuando mis padres murieron, porque sentía una gran pena, el español para mí eran ellos». Sentimental, sincero y tierno, Omar habló de su familia desde el escenario. «Tampoco he podido volver a Madrid, donde vivía mi madre. Ella era para mí Madrid, y Madrid era ella. Mi madre era muy difícil, y muy exigente con mi trabajo, pero me educó muy bien, como pueden ustedes comprobar. Le gustaba mucho el fútbol, fue una gran hincha del Real Madrid. Por eso le compré un piso muy cerca del Estadio. Fui hijo único y ese es el motivo de que esté un poco loco. Pero amo España, tengo nietos españoles». Sharif aseguró que sus mejores películas han sido rodadas en España y concretamente en Granada y Almería. 'Dr. Zhivago' y 'Lawrence de Arabia'. «España me ha traído suerte». Sin embargo, confesó que de cada uno de sus trabajos, «sólo suelo gustarme de verdad durante un minuto y medio, el resto del tiempo no me gusto nada».
Hacía tiempo que no venía a nuestro país, también desde la muerte de su madre, en 1998, «pero me siento feliz de estar aquí para recoger la Alhambra de Honor y recibir este homenaje, el primero que me hacen en España».
Entre sus recuerdos, destacó cómo en la época de sus rodajes en nuestro país, no había ni un solo hotel en la zona de Almería donde grabaron. «Y ahora todo está lleno, completamente lleno», dijo asombrado. Los hoteles son imprescindibles para este hombre que ayer confesó vivir «solo» y, además, de «hotel en hotel». Aunque sea un tópico decir que los ojos de Omar Sharif encierran todo el misterio de oriente, lo cierto es que continúa teniendo esa manera de mirar inconfundible del Dr. Zhivago, que a tantas personas enamoró y continúa enamorando. Ayer dijo que sus 77 años, «son unos 77 años muy buenos, porque así somos la gente del sur, como mi gran amigo, el mejor actor de España», comentó refiriéndose a Carlos Álvarez-Novoa, el inolvidable vecino de 'Solas', de Benito Zambrano, que levantó su mano desde el patio de butacas, como saludo.
Omar Sharif recibió la Alhambra de Honor de manos de la consejera de Cultura, Rosa Torres, y la enseñó a todos con orgullo. No olvidó hacer unos pases de torero desde el escenario, antes de irse, en medio de una profunda ovación.